La hiperqueratosis se observa a menudo en las almohadillas de las patas y en la nariz de los perros. Es común en ciertas razas como Bulldogs, Bulldogs franceses, Cocker spaniels, Labradores y Boxers. También se ve a menudo en perros de mediana edad a mayores. En la mayoría de los casos, la hiperqueratosis no afecta a la mascota. En algunos, sin embargo, puede ser doloroso y causar cojera, lo que significa que es necesario un tratamiento para controlar la afección.
Los crecimientos de queratina se pueden suavizar con un baño de agua tibia durante 15-20 minutos. Algunos recomiendan agregar sales de Epsom al agua del baño. Siga esto con agentes tópicos humectantes para suavizar la almohadilla, como vaselina o bálsamo, que ayudarán a eliminar el material de queratina. Otros diferenciales a considerar para la hiperqueratosis son: pénfigo, síndrome hepatocutáneo o deficiencias nutricionales como el zinc.
El perro de esta imagen es un perro atópico que se ha mantenido estable con su inmunoterapia. Más recientemente, comenzó a desarrollar pododermatitis y quistes interdigitales en una pata, que se trató con antibióticos, esteroides tópicos y ciclosporina. Al principio, pensé que su malestar en la pata era el quiste y la infección, pero ahora que esto está controlado, tuve que concentrarme en cuánto era el problema esta hiperqueratosis.